Defensoría del Pueblo insta al Estado y la población a reforzar los mecanismos de prevención de la violencia y no repetir los sucesos del paro por el censo
22 de Octubre de 2023 11:28 am
Entre
octubre y noviembre del 2022, Santa Cruz fue el epicentro del conflicto por la
fecha de realización del Censo de Población y Vivienda, el cual derivó en
manifestaciones y bloqueos que confrontó a grupos ciudadanos, a favor y en
contra de la convocatoria del Comité Interinstitucional Impulsor de Santa Cruz,
instancia que exigía la atención del Gobierno a sus demandas. Los bloqueos y
manifestaciones evolucionaron en una escalada de la violencia sostenida por
semanas, que derivaron en -directas e indirectas- víctimas de vulneración de
derechos humanos, afectando a las y los ciudadanos que trabajan, estudian,
comercian y sostienen la economía de sus familias y por con siguiente del país.
La
Defensoría del Pueblo, en el marco de su misión constitucional, hizo
seguimiento de los hechos acontecidos durante el conflicto identificando
vulneraciones de diferentes derechos humanos como la vida, integridad, acceso a
la alimentación, atención de salud, acceso a la educación, entre otros
aspectos, que afectaron a la población.
Entre
muchas vulneraciones de derechos, se registró el impedimento del paso de
ambulancias que trasladaban a pacientes oncológicos; se denunciaron agresiones
físicas a poblaciones vulnerables como mujeres e indígenas, ente otros;
violaciones sexuales; intentos de feminicidios; homicidios; quemas de
edificios; saqueos, además del abuso de autoridad de efectivos policiales y el
uso desproporcionado de agentes químicos para controlar los disturbios. Los
aspectos descritos, no dimensionan en su totalidad, la multiplicidad de las
vulneraciones de derechos acontecidos.
Los
perjuicios generados por los conflictos son inaceptables en una sociedad que
debe garantizar el respeto por los derechos humanos de todas y todos sus
ciudadanos, donde un Estado debe dialogar con el pueblo para garantizar la
convivencia pacífica, así como lo establecen los tratados internacionales de
Derechos Humanos, así como la Constitución Política del Estado.
Convocamos
al Estado y a la población en general a no repetir los hechos de violencia y
reforzar los mecanismos de prevención. Este punto de inflexión de la cohesión
social, debe ser abordado como una oportunidad clave para replantear la manera
en que, tanto el Estado como la sociedad, abordan y resuelven los conflictos.
Los
principios del diálogo, la tolerancia y la promoción de una cultura de paz
deben erigirse como pilares y guías que se adopten y apliquen de forma
constante y genuina. Omitir esta responsabilidad conllevaría daños potenciales
que podrían menoscabar la convivencia pacífica y socavar el tejido social que
el Estado Plurinacional ha construido durante más de una década.
La
Defensoría del Pueblo hace hincapié en la necesidad de buscar soluciones
pacíficas y consensuadas para los conflictos políticos, en lugar de recurrir a
la violencia o a medidas que puedan exacerbar las tensiones existentes. En este
sentido, se insta a las autoridades políticas y a los tomadores de decisión a
trabajar juntos para encontrar soluciones equilibradas y justas, que permitan
promover el bienestar y la convivencia pacífica en toda la sociedad boliviana.
La
Paz, 22 de octubre de 2023